Gibralfaro y la Alcazaba, fortalezas en Málaga
Por encima de la histórica ciudad de Málaga, podemos encontrarnos con el verdadero tesoro de Gibralfaro, un buen ejemplo de arquitectura militar musulmana y española del siglo XIV, para mi gusto comparable incluso con la Alhambra de Granada.
La magnÃfica fortaleza de Gibralfaro, situada en el lugar en el que antiguamente existÃa un faro fenicio, del que se deriva su nombre, fue construida para mejorar las posiciones defensivas del palacio nazarà de la Alcazaba. Juntos nos ofrecen uno de los ejemplos más bellos y mejor conservados de la arquitectura musulmana y de la reconquista española.
La Alcazaba, que se halla junto al Gibralfaro, fue construida originalmente como una fortaleza defensiva en el siglo VIII. Posteriormente se convirtió en el recinto fortificado del Palacio de los NazarÃes, gobernantes árabes del reino de Granada.
Durante el siglo XIV, con el incremento del poder de las artillerÃas, la eficacia defensiva de la Alcazaba se encontraba en peligro, por lo que Yusuf I de Granada construyó el Gibralfaro sobre un alto promontorio, al cual la artillerÃa enemiga no podrÃa llegar nunca.
Ambas fortalezas, con sus enormes torres y murallas, se consideraban inexpugnables. Sólo lograron caer ante el largo asedio que los Reyes Católicos, Isabel y Fernando, las sometieron en 1487. El hambre provocó la caÃda de Gibralfaro, antes que la contienda.
Después de la reconquista, los reyes tomaron la Alcazaba como palacio real, y Gibralfaro se convirtió en uno de los puntos clave de defensa contra los piratas de BerberÃa. Incluso después de que la amenaza pirata fuera totalmente rechazada en el siglo XIX, aún estuvo allà acuartelado el ejército español hasta 1925, con sólo un breve perÃodo de ocupación por las tropas de Napoleón entre 1810 y 1814.
La fortaleza es un buen ejemplo de las últimas defensas militares del siglo XIV. Está completamente rodeada por una muralla barbacana, coronada por almenas y puestos de vigilancia. El muro en forma de zig zag sigue los contornos de la colina sobre la que se asienta. Además de por el terreno, esta posición formaba parte también de un sistema de estrategia defensiva.
Las entradas a la fortaleza están en ángulo para permitir a los defensores tener ventaja sobre los invasores. Dentro se pueden visitar los jardines, las cisternas de agua, los hornos, una antigua iglesia cristiana, ahora abandonada, pero que en su dÃa fue una mezquita, y un pequeño museo con uniformes históricos y artefactos de guerra.
Información adicional
* Horarios: La Alcazaba abre todos los dÃas, excepto los martes, al igual que Gibralfaro, de 09.30 a 20.00 horas.
* Precios: La entrada tiene un precio de 1,80 euros para los adultos, y 0,60 euros para los jubilados, estudiantes y niños mayores de 7 años. La visita conjunta de Gibralfaro y la Alcazaba tiene un precio de 3 euros.