Los Jardines de la Taconera en Pamplona

Los Jardines de la Taconera son los más antiguos y bellos de Pamplona. Sus 90.000 metros cuadrados están situados cerca de las antiguas murallas y del casco antiguo de la ciudad. Tiene un carácter romántico y un estilo versallesco.

Combina los árboles y flores con una amplia gama de esculturas, que ofrecen al turista una serie de itinerarios diferentes. Si algo caracteriza a este lugar maravilloso es el mini zoo que hay en el foso de la muralla. Allí veréis ciervos, patos, faisanes, cisnes, pavos reales… todos es un estado de semi libertad.

La Taconera también tiene puertas al más puro estilo arco del triunfo, un monumento al famoso tenor navarro Julián Gayarre, esculturas como la de la Mariblanca, o los arcos ojivales en el monumento al rey Teobaldo II. El Café Vienés es un lugar muy popular para los estudiantes, o para reunirse los amigos.

Los Jardines de la Taconera ya aparecían en los planos de la ciudad de 1719. Siempre han estado abiertos al público, y su entrada norte, el Portal de San Nicolás, de 1666, que se encuentra en la calle del Bosquecillo, es una recreación barroca de un arco triunfal. Otra de las entradas que tenemos es el Portal de la Taconera, próxima a los Jardines de Antoniutti.

La Taconera os cautivará en pocos minutos. Acercaros hasta la calle de las Navas de Tolosa para ver el mini zoo, con una treintena de especies diferentes, que viven en un espacio natural que se ilumina en Navidad. En el otro extremo del foso, en el lado norte, hay otro puno de vista para observar a los animales a través de cinco hermosos arcos apuntados.

El parque cuenta con una muy variada vegetación, con árboles antiguos y exóticos. Está rodeado por las antiguas murallas de Pamplona, y alberga monumentos como los de Mariblanca, uno de los más queridos de la ciudad. En la parte norte del parque hay un mirador que ofrece unas excelentes vistas de algunos barrios de Pamplona y de las montañas de los alrededores.

El Parque Larraina es la continuación natural de la Taconera, y alberga también excelentes vistas sobre el río Arga. Cerca se hallan a su vez los Jardines de Antoniutti, con muchos árboles y buena sombra, además de una pista de patinaje.