Museo de la Casa del Guarda en el Parque Güell
Antonio Gaudà construyó el maravilloso Parque Güell inaugurado en el año 1922, una gran obra modernista que fue incluso nombrada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1984.
En honor a su creador se ha rehabilitado la casa del guarda del parque, convirtiéndola en un museo dedicado a su obra en la ciudad de Barcelona.
Esta casita de dos plantas fue edificada entre 1901 y 1903 para que el guarda del parque viviera en ella, teniendo la obra un carácter funcional. Tras una larga labor de restauración para recuperar su resistencia y colores originales, su función a partir de este mes será la de albergar la exposición llamada Güell, Gaudà y Barcelona: la expresión de un ideal urbano.
Este proyecto ha sido posible gracias a la ayuda e iniciativa del Museo de Historia de Barcelona (MUHBA) y el Departamento de Arquitectura y Proyectos Urbanos de la misma cuidad.
La estructura de la casa se ha aprovechado para ofrecernos tres visiones distintas del artista:
En la planta baja se habla de la propia casa como proyecto arquitectónico y domestico dentro del modernismo, mostrando asà el concepto que persigue el artista que se acerca siempre más a la arquitectura que al esteticismo artÃstico.
En la primera planta se trata el tema del parque desde su creación,y se analiza su función a través de los años, examinando la cooperación de Güell y Gaudà en todo momento y como predijeron el fracaso de su proyecto por la mala accesibilidad al recinto. Desafortunadamente no estuvieron a tiempo de ver como poco después se convirtió en icono artÃstico,destino turÃstico y el uso social y público para la ciudad y todos sus visitantes.
En el desván se proyectará una pelÃcula del parque y alrededores, comparando fotos antiguas y actuales y que hablará de Gaudà y su obra por toda Barcelona, dando a su arquitectura modernista una visión personal.
La exposición trata de acercarnos más a la figura de GaudÃ, su papel novedoso en la arquitectura como vanguardia modernista y agradecerle por sus creaciones y su repercusión en la historia del arte y en Barcelona.
VÃa foto: wearebcn