La Gruta de las Maravillas: visita al interior de la tierra
La Gruta de las Maravillas, en Aracena (Huelva), forjada en el tiempo por la propia naturaleza y dos de sus elementos más sencillos, el agua y la piedra, nos abre sus entrañas para que nos adentremos en un paisaje subterráneo de una profunda e inigualable belleza donde nos muestra a cada paso la verdadera dimensión de la naturaleza y de lo que es capaz por sà misma con un simple y constante goteo sobre sus resistentes y recias paredes de piedra y la perseverancia en el tiempo, conformando un mágico y bellÃsimo escenario de caprichosas formas e inagotable en el tiempo.
Descubierta por un pastor en el año 1884, según la leyenda popular, fue abierta al público en el año 1914, siendo la primera cueva turÃstica de España, asà como la más extensa de la penÃnsula. Es una gran cavidad originada sobre las rocas del Cerro del Castillo y tiene un desarrollo horizontal con una longitud de 2.100 metros, de los que 1.200 metros son visitables, revestida de una abundante y muy variada formaciones geológicas; estalacticas, formaciones que penden del techo; estalagmitas, que se alzan sobre el suelo; columnas, cuando una y otra se unen; gours, que son las bañeras, hoyos o charcos que se forman en el suelo; coladas, cuando el agua fluye por la superficie y crea láminas de distintas formas y colores; pisolitos, bolas calcáreas que se crean en los charcos; excéntricas, cuando se crean formas caprichosas, como su nombre indica, en forma de estrella, erizo, explosión, etc.; mantiene una temperatura uniforme entre los 16º y 19ºC, su humedad relativa entre 98 y 100%, y su punto más bajo a 115 m. de profundidad y un lago a 70 m. de altura.
La visita, que tiene una duración de una hora, aproximadamente, tiene un recorrido circular con galerÃas superpuestas en tres niveles de altura distintos, comenzando en la Sala de las Conchas, y a partir de aquà se recorre el primer nivel de galerÃas que se caracteriza por la presencia del agua y que nos conduce hasta el Gran Salón, que es la cavidad más grande de la Gruta; desde donde se asciende a la Sala de la Catedral, ya en el segundo nivel, donde se aprecian un variado y amplio número de formaciones, el Baño de la Sultana, la Sala de la Esmeralda y la CristalerÃa de Dios, y algunos «gours» inundados; a continuación se desciende al primer nivel para admirar la Sala de los Garbanzos, los Desnudos y de nuevo el Lago que nos acompaña hasta el final del trayecto.
El recogimiento mantenido durante la visita envuelto por el silencio de las reposadas aguas de sus lagos y el ritmo acompasado del perseverante goteo desde las alturas que nos deja sobrecogidos y suspendidos en el tiempo queda interrumpido en el momento de la salida, devolviéndonos al mundo del que partimos, dejándonos una grata y relajante sensación de haber realizado una viaje, aunque algo corto, al interior de la tierra y la era más remota.
Para subsanar este momentáneo vacÃo puede ser una acertada decisión, ya que, para bien, esta maravillosa Gruta se encuentra en el mismÃsimo centro del bonito pueblo de Aracena, tierra de gran riqueza micológica y de estupendos productos derivados del cerdo ibérico, dirigirse a unos de los muchos restaurantes que se concentran en los alrededores de la Gruta y tomarse un exquisito «revuelto de setas con jamón ibérico«, regado con un buen vino, que también está de «maravilla», aunque hay otras variedades con estos mismos ingredientes muy satisfactorias, e incluso ambas por separado están más que extraordinarias; la cocina local también tiene buenos recursos en la carne de caza, la castaña y los productos de la huerta, pero a ser posible que no falten las setas y el jamón. Y de entre los muchos restaurantes existentes, el Restaurante José Vicente y el Restaurante Casas podrÃan ser dos buenas elecciones.
Con todo ésto y un paseo por el agradable pueblo de Aracena, el dÃa habrá resultado de «pelÃcula», y como curiosidad hay que decir que la Gruta de las Maravillas ya sirvió como lugar escogido para el rodaje de las pelÃculas «Tarzán y las minas del rey Salomón» y de «Viaje al centro de la tierra».