Mallorca, de excursión por la isla
Palma de Mallorca siempre es uno de los destinos más solicitados cuando llega la temporada estival. Tanto el encanto de sus playas como el ambiente de sus terrazas y la vida nocturna de la capital, hacen de ella un lugar indispensable para el turismo veraniego. Pero hoy os vamos a llevar fuera de lo que es la ciudad mallorquina. Nos vamos de excursión por la isla, a descubrirla, a vivirla, a llegar a la conclusión de que vuestra escapada a Mallorca no se debe quedar solamente en la capital. ¿Os venÃs?.
Gracias a las cortas distancias que existen en la isla, podemos hacer varias rutas y elegir varios destinos. Uno de los puntos más visitados es Llucmajor a 25 kilómetros de Palma. Este es un lugar histórico, habida cuenta de que en él tuvo lugar la batalla entre las tropas de Jaume II de Mallorca y Pere d’Aragó, y que terminó con la muerte del rey mallorquÃn y la independencia del Reino de Mallorca. Aquà visitaremos el complejo de Capocorb Vell, un monumento megalÃtico tÃpico de la cultura prehistórica balear.
Siguiendo la carretera MA-19, a 13 kilómetros de Llucmajor se halla Campos del Port y su balneario de Sant Joan, conocido desde época romana. Desde las dunas de Es Trenc y las marismas de Es Salobrar no es extraño que nos encontremos con multitud de aves acuáticas y migratorias recorriendo el cielo balear. Cerca de aquà está el pequeño pueblo de Felanitx, con la Parroquia de Sant Miquel del siglo XIV y la hermosa cima del Puig de Sant Salvador, en la que podemos ver el Castillo de Santueri del siglo XIV.
A partir de aquà iniciamos un precioso recorrido por la costa, con la presencia de numerosas calas, hasta llegar a las Coves del Drac en Portocristo, el puerto de Manacor, y la Punta de n’Amer, con su torre del siglo XVII, desde la cual, si avistamos bien y nos coge un buen dÃa despejado, podemos ver hermosa la BahÃa de Son Cervera.
Banyalbufar
A 32 kilómetros de Palma se halla Andratx. En ella visitaremos la Iglesia de Santa MarÃa, el maravilloso puerto pesquero y el Castillo de Sant Elm, frente a la isla de Dragonera. Unos 20 kilómetros más adelante veremos Estellencs, un pequeñÃsimo pueblo blanco entre la sierra de Tramuntana y el mar. Casi en la misma situación, en la costa brava mallorquina y colgando en una pendiente de difÃcil acceso pero de maravillosa vista, se halla Banyalbufar, con las torres de Ses Animes y la de Sa Baronia.
La carretera sigue serpenteando a través de la Sierra de la Tramuntana, atravesando los pueblos de Deiá y Soller. Detrás del escarpado Puig Major se llega al pueblo de Escorca. Allà visitamos el Monasterio de Lluc, el gran centro religioso de la isla. En el Monasterio se venera la imagen de la Virgen de Lluc, una talla en piedra de una Virgen negra del siglo XV, patrona de la isla.
La excursión finaliza en Pollença, al borde de la afilada penÃnsula de Formentor. El paisaje aquà es tremendamente solitario y sobrecogedor, habitado sólo por halcones y cabras salvajes. También, entre los riscos de la Sierra de la Tramuntana, se encuentra la única colonia insular de buitre negro, integrada por 60 ejemplares.
Asà pues, no debéis dejar de hacer esta bellÃsima excursión por los alrededores de Palma. Hermosos paisajes, vistas preciosas, calas y playas en perfecta conjunción con la sierra, y pequeños pueblos blancos y marineros enclavados entre los montes de la Tramuntana y el Mar Mediterráneo. Un paisaje único e irrepetible.