La Via Verde de Italica en Sevilla
Hasta la década de los 60, las minas de Aznalcóllar, al noroeste de Sevilla, estaban unidas al rÃo Guadalquivir a través de un ferrocarril de 27 kilómetros de largo, que hoy se ha convertido en la VÃa Verde de Itálica. Entre Camas y Sevilla, la ruta se denomina la VÃa Verde de Camas, que se convierte en el VÃa Verde de Itálica entre Camas y Santiponce.
La vÃa verde cruza el yacimiento arqueológico romano de Itálica y continúa al noroeste de Gerena. El último tramo del ferrocarril, de 5 kilómetros, desde Gerena hasta las minas de Aznalcóllar, no ha sido reacondicionado para esta vÃa. La ruta puede ser realizada a pie, en bici o a caballo. Sólo la vÃa verde de Camas es apta para personas con silla de ruedas.
La vÃa verde Camas se inicia al oeste del centro de Sevilla, a orillas del Guadalquivir, cerca de la Cartuja, en el aparcamiento de Puerta de Triana. A partir de aquÃ, hay que cruzar el rÃo por un estrecho puente y tomar la SE-30 antes de llegar a Camas, 2 kilómetros dentro de la ruta, siguiendo la carretera N-630. La antigua estación de tren de Camas ha sido restaurada y alberga ahora un bonito parque con varios vagones de ferrocarril.
En el kilómetro 3 comienza la vÃa verde Itálica. En el kilómetro 3,5, la vÃa verde pasa por debajo del viaducto de la lÃnea de ferrocarril Sevilla – Huelva. Si usáis bici, debéis desmontar en ese tramo, ya que aún aquà hay muchas travesÃas de ferrocarril y caminos de grava. En el kilómetro 5, tras Santiponce, llegamos al yacimiento arqueológico de Itálica. Si deseáis tomar un desvÃo para visitarlo, debéis tomar la N-630 norte hasta Guillena.
La vÃa verde gira al oeste, y pasamos por las ruinas del Cortijo de Villadiego, en el kilómetro 9,5. La ruta nos lleva ahora por un camino de terraplenes, hasta el kilómetro 20, donde encontramos un paso a nivel. Tomaremos la carretera de la izquierda, que nos conduce, 1 kilómetro más adelante, a los restos de una fortificación árabe, el Torreón de San Antonio.
Un kilómetro más allá atravesamos una senda de eucaliptos hasta la estación de Gerena, en el kilómetro 22. A partir de aquÃ, la vÃa se divide: a la izquierda nos encontramos el último tramo de 10 kilómetros del ferrocarril a Aznalcóllar, y a la derecha, el pueblo de Gerena, a 4 kilómetros y medio. Asà que tomamos la vÃa de la derecha.
Esta vÃa nos lleva por una cañada, pasando el Cortijo de la Pizana, a través de una serie de eucaliptos y un lugar donde sobrevuelan las cigüeñas. Justo antes de llegar a Gerena nos encontramos con las canteras de granito, que hoy son el vertedero de la ciudad.
El tramo de camino hasta Aznalcóllar no es de fácil camino, sobre todo por su deterioro. El puente sobre el rÃo Guadimar se ha derrumbado, pero vale la pena llegar hasta este punto para ver los restos de un acueducto romano que se utilizaba para el transporte de agua hasta Itálica. Si logramos cruzar el rÃo, veremos al fondo Aznalcóllar, y asà llegaremos al final de nuestra ruta.
Es la primera vez que entro en esta página y me ha encantado leer el artÃculo, pues es una vÃa que utilizo mucho por diversión, dado que soy ciclista de montaña y dicha ruta es magnÃfica para los dÃas en que no quiero subir cuestas.