Excursión por la ría de Villaviciosa

Ria de Villaviciosa

Desde puente Huetes hasta la playa de Rodiles en pleno Principado de Asturias, la ría mide unos ocho kilómetros y se estrecha en la desembocadura, obligada por la barra arenosa de Rodiles. Durante el trayecto el agua, no hace falta probarla, tiene varios gustos: hacia el mar, debido a la presión mareal, es cada vez más salada, hacía los ríos se dulcifica.

El agua fluvial proviene de numerosos regastos, arroyos y ríos como el Valdediós, el Vicaba y Valdebárcena, todos de curso corto. Los suelos combinan, fundamentalmente, arenas margosas (son del Pérmico), areniscas rojas (datan del Triásico) y calizas. Y una cosa más, la arena es marina, proviene de los flujos mareales.

La vegetación existente se encuentra en buen estado de conservación, al menos en ciertas áreas. Hay extensiones de comunidades halófilas. La flora agrupa unas 125 especies. En la ría se pueden ver algunos vegetales muy raros, como la Spartina marítima (no crece en ningún otro sitio de Asturias), o como la Suaeda vera, no muy común en el litoral cantábrico.

Encontraremos praderas de Zostera noltii en los fangos mareales y, en áreas más elevadas, manchas de Spartina marítima (siendo el único lugar del Principado donde esta aparece). Por encima de ellas se aprecian matorrales halófilos, entre los que destacan los de la citada Suaeda. La representación de juncales y cañaverales se encuentra muy reducida debido a la presión agrícola, aunque aún se observan pequeñas zonas en las que sobreviven.

Lamentablemente, la valiosa vegetación de las dunas de Rodiles se encuentra fuertemente degradada por el mal uso que de ellas hacen los veraneantes. Sauces y tamarindos bordean algunos puntos de la ría. En cuanto a la fauna, la ría es la segunda zona asturiana en importancia para invernada y paso migratorio de las poblaciones de las aves acuáticas.

Además, en ella nidifican especies y comunidades de invertebrados marinos. Se han contabilizado más de cien especies de aves acuáticas y marinas pertenecientes a 16 especies, destacando la presencia de zarapitos, chorlitos, chorlitejos, vuelvepiedras, agachadizas, agujar, andarrios y ostrero, entre las limícolas, y de ánades reales, silbones, cucharas y cercetas, entre las anátidas.

Foto Vía: ashtur2000




Top