Qué ver en la Catedral de Toledo
¿Quién no ha pensado alguna vez en visitar una ciudad tan monumental como Toledo?. La historia milenaria que alberga es motivo más que suficiente para perdernos en ella. Su laberinto de maravillas arquitectónicas, las tres culturas que la han forjado, cristiana, árabe y judÃa, y la panorámica postal que nos presenta en la distancia son apenas simples excusas para que no dejemos de visitarla.
Uno de sus grandes monumentos es la Catedral de Toledo, construida entre 1247 y 1493. Hay que reservar unas cuantas horas para poder visitar totalmente este grandÃsimo templo. Desde la portada central, conocida como la Puerta del Perdón, flanqueada por la Puerta del Juicio y la Puerta de la Torre. En la fachada sur tenemos la Puerta Llana y la Puerta de los Leones, mientras que en la fachada norte veréis la Puerta del Reloj, la más antigua del templo, ya que data del siglo XIII.
Pasamos ya al interior de la catedral para conocer la Capilla Mayor, que vemos desde una hermosa reja de Villalpando, y el impresionante retablo estilo gótico. En el centro de la nave central tenemos el coro, con varios sitiales tallados de gran belleza. Si desde el coro miráis hacia arriba veréis dos órganos, y desde allà el altar con la Virgen Blanca, una talla del siglo XIV.
Desde el altar podemos bajar hasta la Capilla del Santo Sepulcro, que alberga los restos de Santa Úrsula, mártir del siglo IV. Ya en la cabecera del templo hay que ver la Sala Capitular, y a su lado tres hermosas capillas, la Capilla de San Ildefonso, del siglo XIV, la Capilla de Santiago, del siglo XV, y la Capilla de los Reyes Nuevos, del siglo XVI.
Pasamos a la antigua sacristÃa para ver el Museo Catedralicio, que expone quince cuadros de El Greco, además de obras de Goya, Zurbarán, Velázquez, Tiziano y Rubens. Junto a la sacristÃa tenemos la Capilla del Sagrario, donde se halla la Virgen del Sagrario, patrona de Toledo. Cerca tenemos el tesoro de la catedral, con una impresionante custodia de más de dos metros de altura y 172 kilos de peso.
Otros detalles que debéis ver en esta Catedral de Toledo es el claustro, del siglo XV, la curiosa Puerta del Mollete, desde la que se repartÃa pan a la gente necesitada, y la torre de la catedral, que alberga hasta ocho campanas, entre ellas la conocida como la Campana Gorda, de 17 toneladas de peso.
La visita a esta catedral debe ser muy minuciosa, ya que estaréis rodeados de arte e historia. Estaros muy atento a todos los detalles, ya que seguro que saldréis muy sorprendidos de la visita.
Foto VÃa Jlgiménez