Ayllón, saboreando el corazón de Castilla
Tuvimos la suerte de visitar a la caída de la tarde el pueblo de Ayllón, al nordeste de la provincia de Segovia. Ayllón es de esos pueblos que te encuentras en el camino, casi sin querer, y del que tienes la premonición que vas a encontrar un verdadero tesoro perdido en estas tierras. La verdad es que no nos equivocamos.
Ayllón se encuentra muy cerquita ya de la provincia de Soria. Entramos en ella imbuidos por el silencio que, a esas horas de la tarde, se derramaba ya por las calles de la villa. Edificios de piedra y casas nobiliarias empezaron a salirnos al paso, como avanzadilla de la robusta Torre de la Martina que domina el horizonte de este lugar.
La Casa del Águila, del siglo XVI, o el Palacio del Obispo Vellosillo, declarado Monumento Histórico Artístico en 1974, son algunos de los mejores ejemplos de la arquitectura que impregna este rincón castellano. Un puente romano y un arco de piedra son la puerta de entrada de Aullón. Pasado el arco, a nuestra derecha, la efigie imponente de la Casa Palacio de Contreras, con su precioso estilo isabelino.
Desde esta casa las calles desembocan en la Plaza Mayor, centro neurálgico de Ayllón. Nos acercamos hasta la fuente del centro, con sus cuatro caños, que data de 1892, y contemplamos los soportales que rodean este espacio, tan típico y que tanto nos hace recordar que estamos en pleno corazón de Castilla, además del Ayuntamiento y la Iglesia de San Miguel. Aquí vuelve a saludarnos la Torre de la Martina, con su triste mirada de piedra.
No muy lejos nos sorprende la Iglesia de San Juan, uno de esos pequeños templos románicos por lo que siento tanta devoción, sobre todo por la sencillez de sus líneas y la belleza y el misticismo que irradian. También podéis visitar el Convento de las Madres Concepcionistas, del siglo XVI.
Y es que Ayllón es de esos lugares que se puede visitar en unas horas, pero que nos deja un recuerdo sencillo, y a la vez imborrable. Una mezcla de silencio y algarabía, una expresión de arte y misterio, lleno de historias y leyendas. Es lo que tiene saborear el corazón de Castilla.
Foto Vía Catedrales e Iglesias