Catedrales de Palencia, Lérida y Astorga
Los amantes del arte y la arquitectura, siempre que buscamos alguna escapada interesante, solemos recurrir a lugares y monumentos conocidos. Hoy os quiero invitar a conocer tres grandes templos que he podido descubrir, en esos tÃpicos viajes en donde te llevas alguna que otra sorpresa agradable. Para decirlo de alguna manera, os invito a descubrir mis tres sorpresas arquitectónicas.
A la Catedral de Palencia ya la llaman, curiosamente, la Bella Desconocida. Sin lugar a dudas que puede competir con las Catedrales de León o la de Burgos. Dicen que su desconocimiento se debe a que pronto fue apartada del Camino de Santiago. Pero, sin embargo, yo me quedé extasiado con su interior. Este templo fue construido entre los siglos XIV y XVI sobre una antigua catedral románica.
Un tremendo torrente de luz espiritual llena la espaciosa nave central, luz que proviene de sus amplias vidrieras. Un pequeño paseo por su interior nos lleva a visitar la sala capitual, y el precioso claustro del siglo XVI, obra de Gil de Hontañón.
Desde Palencia os llevamos hasta la Seu Vella de Lérida, con una historia moderna insólita en un paÃs católico como España. En 1707, durante la Guerra de Sucesión, las tropas francocastellanas entraron en Lérida. Irritado por la resistencia, Felipe V ordenó la desacralización de la catedral, convirtiéndose en cuartel hasta 1947.
Esta catedral se construyó entre los siglos XIII y XV, justo donde se encontraba la antigua mezquita. Su altura domina todo el valle que la rodea. Os recomiendo al visitarla acercaros a su bellÃsimo claustro, justo a la entrada del templo. A simple vista, lo que más llama la atención es su torre campanario de 70 metros de altura, construida entre 1364 y 1426.
Por último nos acercamos hasta Astorga, una de las ciudades más monumentales de España. No sé porqué sus monumentos y su Catedral no son tan conocidos, ya que la visita a la ciudad es realmente un placer. La Catedral de Santa MarÃa de Astorga fue construida entre los siglos XV y XVIII. A mà me encantó la fachada barroca, de gran decoración escultórica, con escenas del Nuevo Testamento.
Nada más entrar en ella nos fijaremos en el retablo mayor, realizado en 1560. Podéis visitar también, junto a la Catedral, el Palacio Arzobispal. A primera vista os parecerá una obra gótica, pero, para vuestra curiosidad, es obra de GaudÃ.
Aquà tenéis tres muestras de grandes templos en nuestro paÃs. Una manera más de demostraros que España guarda rincones y monumentos de categorÃa universal. Sólo hace falta buscar un poco más, y salir un poco de las sendas ya conocidas por todos.