Olmedo, museo del mudéjar en Valladolid
La anchas y extensas tierras de Castilla tienen rincones en donde el soplo de la Edad Media sigue campando con su banderola de calles, callejuelas y monumentos. Plazas fuertes, torres regias y fortalezas copan el horizonte de esta dehesa de pasados milenarios.
A unos 45 kilómetros de Valladolid, acunada entre los rÃos Eresma y Adaja, y besando el aire en sus olmos, duerme el letargo de los siglos Olmedo, cuna de caballeros y motivo de inspiración de grandes escritores de la época. ¿Sabéis el dicho de Olmedo de los siete sietes?. Siete pueblos, siete conventos, siete iglesias, siete plazas, siete arcos, siete fuentes y siete casas señoriales.
Si hacemos caso a este incomparable legado, más nos bastarÃa quedarnos un fin de semana por esta zona y contemplar todo lo dicho. Olmedo es pueblo de soportales, donde guarecerse de las lluvias y el sol que en verano castiga estos contornos, pueblo de casas nobiliarias, casonas con escudos de armas en su fachada, y hogar de mil y un recovecos en los que perdernos.
La Iglesia de Santa MarÃa del Castillo, de estilo gótico mudéjar, con bellos retablos en su interior, es uno de los viejos testigos de este legado que es Olmedo. No puede ser menos la Iglesia de San Miguel, de la que destacamos en especial sus retablos y la vieja cripta, en la que se venera la patrona de Olmedo, la Virgen de la Soterraña, o la Iglesia de San Juan, con la célebre Capilla de los Cotes, de estilo plateresco, y la hermosa Iglesia de San Andrés, hoy auditorio.
Olmedo es también cuna del románico y del mudéjar. Nada más que tenéis que daros cuenta visitando el Parque Temático del Mudéjar, en donde se exhiben réplicas de los muchos monumentos mudéjares que pueblan España.
Pero en Olmedo hay que perderse por su Plaza Mayor, su Fuente del Caño Nuevo, los restos de sus murallas, la Casa de los Dávila, el Arco de la Villa. Lugares y rincones que se funden en la noche de los tiempos, y desde donde buscamos a uno de los personajes más célebres, sea o no de ficción, que ha dado Olmedo, el insigne Caballero de Olmedo, de Lope de Vega.
Un lugar perfecto para una escapada de fin de semana de turismo rural por las tierras castellanas. No dejar de visitarlo siempre que podáis.
Foto VÃa Rabiespierre