Los frisuelos o frixuelos, postre típico de Asturias
Seguro que sois capaces de decirme algunos de los principales productos de la gastronomía asturiana, ¿verdad? ¿Quién no ha oído nunca hablar de la fabada, la sidra, el cachopo o el queso de cabrales? La riqueza de la cocina de esta región es realmente muy sugerente. Hay platos para todos los gustos, y una repostería que a los golosos como yo nos resulta imposible de resistir.
Recordaba ahora aquella vez que en una pastelería tradicional de Cudillero compramos unos frisuelos. No los había probado nunca… pero de tan buenos tuve que volverme para preguntarle al dueño por la receta. «Yo te la digo, pero el secreto está en hacerlo o no en Asturias», me dijo socarronamente.
Los frisuelos o frixuelos son un postre típico que se puede hacer de muchas variantes. Hay quien los rellena de miel, de nata o incluso de compota de manzana (dicen que esta última es la manera más tradicional). Aquí os cuento la receta que me escribió aquel amable señor de la pastelería. Tal cual.
– Ingredientes
- medio litro de leche
- 2 huevos
- 200 gramos de harina y 50 gramos de azúcar
- una cucharada de mantequilla derretida
- sal
- raspadura de un limón
– Elaboración
En primer lugar se ponen todos los ingredientes en la batidora, y se bate bien hasta que quede una crema bien espesa. A continuación se deja reposar en una jarra al menos una media hora. Es el momento de echar un poquito de aceite en una sartén, cubriendo el fondo de esta con un poco de la crema. Se deja freír todo y se le va dando la vuelta para que se fría bien por ambas partes.
Repetimos este proceso hasta que se acabe la crema, poniendo luego los frisuelos uno sobre otro y sirviéndose con azúcar por encima. Si no le queremos echar azúcar se pueden rellenar con lo que queramos.
También con la crema se pueden hacer diferentes formas para que los frisuelos nos salgan de una manera u otra. Para que queden más esponjosos lo mejor es echar bastante aceite para que se cubran por entero.
Ya veis que no tiene ningún secreto hacerlos, ¿verdad?
PARA SABER MÁS…
¡Qué buena pinta!
Estan entre unas tortitas y unos creps.
Esto me falto de probar cuando fuimos alli de vacaciones, y eso que creo que invertimos casi un 50% de nuestro tiempo a comer.
Intentaré hacerlas en casa